Autor: admin 4 julio 2009

Ricardo Martínez Conde

Lo pasajero llama a la muerte. Lo misterioso es hasta qué punto ese pensamiento de consumición se asemeja a un pensamiento de consumación. La tristeza como belleza. No es todo, pues, tragedia y derrota. Algo hay de una épica soñadora que seduce. ¿Será esa parte de la muerte de la que ha derivado la Religión?

La repetición constituye un verdadero clamor: se repite la vida paso a paso, de uno a otro, de una generación a otra. Se repite cien veces el mismo gesto a lo largo del día y se repite lo ya contado con nueva fruición. Se repite el instinto de amor e incluso lo amado. Se repite la muerte y pocos parecen advertirlo como el argumento principal.

Autor: admin 10 septiembre 2007

Ricardo Martínez-Conde

Es bien sabido: todo viaje es, o se realiza, hacia uno mis­mo. Lo que difiere son las circunstancias. Y tal es lo que he podido sentir —pues me ha quedado, sobre todo, la memoria de esa reflexión— después de mi viaje a Italia.

Llegué a Termini, nudo físico y sociológico de las comunicaciones en Roma, casi de madrugada, hora en que los sentidos se orientan de un modo más riguroso que por el día. Y hube de reparar ya en algunas cosas más o menos reales, o importantes: rechazar un coche-taxi pirateado por dos individuo gesticulantes que enseñaban medio carné del gremio (primer acercamiento visible a las realidades que nos mostró en su día el Neorrealismo cinematográfico; vigente todavía, latente, en muchas situaciones); atender al cielo pespunteado de reflejos blancos, móviles y ágiles: las gaviotas nocturnas moviéndose al desgaire sobre las luces de la estación; y tomar, un tanto aprisa, nota de un texto impreso en el tímpano de una iglesia cercana: venite a me, voi toitts affaticati e opressi, ed io vi ristorero. Me sentí aliviado, por qué no decirlo: uno oculta en lo sagrado (¿en las palabras?) sus convicciones. Ahora bien, sobre todo, había ya a un hecho cierto: pertenecía a un nuevo paisaje; algo de un valor huma-
no trascendente, según 
nos enseñó a pensar Claudio Magris, que ha reflexionado tanto sobre el valor de la frontera.

Autor: admin 13 enero 2007

Ricardo Martínez-Conde

Chamier le preguntó una vez a Goldsmith, el poeta, lo que quería decir al emplear la palabra slow (‘lento’) en uno de sus versos, a lo que este respondió: —Remoto, sin amigos, melancólico, lento”.

—¿Significa lentitud en los movimientos? —inquirió de nuevo. Y, ante su respuesta afirmativa, fue James Boswell el que contestó: 
—No señor, usted no quiso decir lentitud en los movimientos, sino esa indolencia en los movimientos (¿y en los pensamientos?) que le sobreviene a un hombre que se halla en soledad.

Pues bien, a tenor de este ejemplo, venido a medida respecto de lo que es, o ha de ser, la precisión en las palabras, y, por extensión, la interpretación de un gesto o actitud concreta (todo ello visto con carácter crítico en lo que supone de significación, de contenido espiritual), podríamos considerar la actitud reflexiva de aquel otro poeta cuya relevancia mayor fue su “lentitud en soledad”, su capacidad de introspección en todo aquello que hace a los códigos vitales del hombre, a fin de aproximarnos al posible significado de su meditado discurso.